Mantenerse en forma en navidad es necesario ya que ademas de cuidar la figura, todos esos excesos pueden pasarnos factura a nivel de salud.
Pero no te asustes!!!

Se puede Disfrutar de las fiestas sin que tú cintura lo note (demasiado).

En esta época del año la gran mayoría, gana alrededor de un kilo o mejor dicho un par de tallas, como si fuera algo de lo que no podemos escapar. Siempre tendrás la opción de comer alimentos de calidad que no necesariamente vayan a tu cintura.
Te invito a que sigas los consejos que te dejo para estas navidades.
descarga la guía y a ponerlos en practica.

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Son muy pocas las mujeres que pueden presumir NO tener la llamada “piel de naranja” en ninguna parte de su cuerpo. La triste realidad es que el 90% de las mujeres padece esta afección estética.

¿Qué es la celulitis y cómo se produce?  La celulitis es la inflamación del tejido celular subcutáneo causada por una alteración o mal funcionamiento de la circulación a nivel micro. La apariencia rugosa o con huequitos que es tan poco atractiva, se produce debido a la retención de líquidos, la cual dificulta la circulación sanguínea y linfática. Los dos componentes de la piel que se alteran por esto son: el ácido condroitín sulfúrico y el ácido hialurónico.

¿Cuáles son las causas de la celulitis?  Todavía no se ha identificado una causa específica de la celulitis, pero se sabe que hay factores que contribuyen a la aparición de la celulitis, entre ellos:

* Fumar y consumir bebidas alcohólicas, puesto que disminuyen la oxigenación de los tejidos.

* La falta de ejercicio o sedentarismo.

* El sobrepeso y la obesidad.

* Las várices porque dificultan el retorno venoso y contribuyen a la retención de líquidos.

* El uso de ropa muy ajustada que dificulte la circulación.

* Una dieta rica en grasas saturadas.

* Tomar anticonceptivos por vía oral (pastillas).

* La herencia es otro de los factores que puede contribuir a que tengas celulitis: si tu mamá tiene celulitis, tú vas a tener más predisposición.  Además, otras condiciones como el embarazo (debido al aumento de hormonas y la carga circulatoria) pueden ser causa de la celulitis.

¿Tipos de celulitis?

CELULITIS GENERALIZADA: Aparece exclusivamente en mujeres obesas, con hábitos alimentarios desequilibrados. Comienza en la pubertad y con el aumento de la edad los factores suelen ser cada vez más desfavorables. Los trastornos se incrementan lo que ocasiona importantes cambios estéticos. Se presenta en prácticamente todo el cuerpo, brazos, abdomen, cadera, glúteos, muslos y demás zonas de la piel.

CELULITIS LOCALIZADA: Las celulitis localizadas originan fenómenos dolorosos, las zonas donde muestra preferencia son las piernas, el abdomen, las nalgas, los tobillos, la parte inferior de la espalda, la parte superior de los brazos, la parte superior de la espalda justo debajo de los hombros. Este tipo de celulitis se la observa en la pubertad y en jóvenes de 16 a 20 años, en casos especiales hasta los 35 años. Cuando aparece en las mujeres adultas, ellas refieren haber tenido piernas con importante adiposidad localizada. Desde los inicios se encuentra el signo de “Piel de Naranja”.

SÍNTOMAS:

– Dolor, sensación de pesadez y “síndrome de piernas cansadas”
– Edema importante.
– Dificultad en la movilidad.
– Dolor espontáneo y provocado.

CELULITIS DURA: Se observa este tipo de celulitis generalmente en deportistas o bailarinas con tejidos firmes y bien tonificados. Se evidencia por la prueba del pellizcamiento con aparición de “Piel de Naranja”. Debido a una mala nutrición y oxigenación, la capa epidérmica es delgada y de aspecto seco y rugoso. Por eso, en general, coincide con la aparición de estrías a consecuencia de la ruptura de las fibras elásticas de la piel. Este tipo de celulitis no presenta dolor espontáneo ni provocado

CELULITIS FLÁCCIDA: Es típica en personas sedentarias o aquellas que alguna vez fueron activas y ya no las son. También se presenta en personas que han sido sometidas a distintos tipos de tratamiento, en donde han subido y bajado de peso bruscamente.

SÍNTOMAS DE ESTE TIPO DE CELULITIS:

– Escaso tono muscular que produce deformaciones, zonas que se hunden o aplastan a la menor compresión.
– Al caminar se aprecia balanceo de la masa celulítica.
– “Piel de naranja” a simple vista.
– Fatiga permanente.
– Debilidad general.
– Mareos y tendencia a la hipotensión.
– Nerviosismo.
– Insomnio.
– Frecuentemente asociada con: varices, varicosidades, edemas blandos con retención de líquidos.

CELULITIS EDEMATOSA: Se encuentra en mujeres de todas las edades, pero es más frecuente en jóvenes y adolescentes. En mujeres de edad suele presentarse como piernas gruesas. Se localizada principalmente en los miembros inferiores y la piel presenta a simple vista la típica piel de naranja.

¿Existe tratamiento para la celulitis? El mercado está inundado de productos y métodos que prometen la desaparición de la celulitis. Sin embargo, su efectividad es cuestionable. Entre ellos se encuentran sustancias tonificadoras de las venas (venotónicas), los protectores capilares como los flavonoides, cremas con centella asiática o cafeína. También los métodos como los masajes;  la mesoterapia, el cual consiste en inyectar medicamentos estimulantes de la microcirculación por vía subcutánea que dicen acabar con los depósitos de grasas. Y la liposucción (que es la cirugía mediante la cual se aspira la grasa). Este último a veces hace que la celulitis se vea peor.

Quizá de todos los métodos, el que funcione un poco mejor sea uno a base de rayos láser y sistemas de radiofrecuencia que requieren tratamientos frecuentes (dos veces a la semana por varias semanas). Los resultados puede durar hasta seis meses.

Si tienes celulitis, te aconsejo que empieces por revisar tu alimentación, asegúrate que es saludable. Si estás en sobrepeso, pierde peso y por supuesto, haz del ejercicio parte de tu rutina. Recuerda que si tus músculos se fortalecen la celulitis se notará menos. Y, lo más importante…. con estos cambios, no sólo te verás mejor, también estarás invirtiendo en tu salud!!!

 

 

 

 

Porque aclarar ciertas leyendas urbanas puede hacerte sacar (mucho) más beneficio a tu entrenamiento.

Existen algunas afirmaciones convertidas en mito que llevan a todo aquel que se las cree a montarse en la elíptica durante una hora como si no hubiera mañana para “quemar grasa” o a no querer ni oír hablar del entrenamiento con pesas para evitar llevarse algún que otro susto sobre la báscula. Sin embargo, como buenos mitos que son, no siempre son ciertos. O sí. Por eso resulta fundamental aclarar los más comentados. Porque saber la verdad, y solo la verdad, te ayudará a potenciar el rendimiento de tu entrenamiento y sacarle el máximo partido.

  • No se empiezan a quemar calorías hasta que no llevas 25 minutos haciendo ejercicio aeróbico. Falso. Se queman calorías desde el primer momento. Sin embargo, aunque se queman calorías desde el minuto 1, es cierto que las llamadas “calorías de grasa” no vamos a metabolizarlas desde el primer momento. “Es verdad que nuestro cuerpo tarda un poco en utilizar ese combustible del que nos queremos deshacer”.

 

  • Tengo que hacer abdominales para perder la grasa de la barriga. Se ha demostrado que el organismo no es capaz de eliminar grasa de forma localizada. Cuando eliminamos grasa corporal, la perdemos de las diferentes zonas en las cuales el cuerpo la almacena. Por lo tanto, por muchos abdominales que hagamos no vamos a perder barriga, lo que puedes conseguir es fortalecer la musculatura de la zona, pero la grasa seguirá allí. ¿La solución? Si queremos perder grasa abdominal debemos generar déficit calórico a través de la combinación de ejercicio cardiovascular intenso con una alimentación adecuada.

 

  • Si levanto mucho peso, sacaré demasiado músculo (FALSO): Para aumentar la masa muscular, es cierto que es necesario hacer ejercicios de fuerza. Sin embargo las mujeres tenemos mayor dificultad a la hora de expandir nuestros músculos, así que no tengas miedo de tomar las mancuernas porque no vas a acabar con los brazos gigantes. Pero sí más definidos y tonificados.

 

  • Sudar mucho implica perder más peso. ¿Quién no se ha cubierto alguna vez con una faja térmica antes de ponerse a correr en la cinta para sudar más y, por ende, perder más peso rápidamente? Si lo has hecho, te equivocabas. “El único peso que perderás de esta forma es el del sudor, es decir, el de agua y los electrolitos. Este peso volverás a ganarlo tan pronto como vuelvas a comer y beber agua”. La sudoración en exceso no tienen ningún objetivo útil en la pérdida de peso.

 

  • Si como carbohidratos por la noche, engordaré, (VERDAD A MEDIAS): Es verdad que, a la hora de la cena, deberíamos llegar sin hambre. Es el mejor indicador de que hemos quedado satisfechos. Y no picaremos en exceso al final del día. Se desaconseja tomar carbohidratos por la noche debido a que nuestro cuerpo entra en fase de reposo y le cuesta más quemar calorías. Pero si eres un deportista habitual no deberías tener mayores problemas con los carbohidratos por la noche.

 

  • Los dolores son buenos (FALSO): Un mito muy extendido y que, afortunadamente, ya vamos olvidando. Los dolores no son más que micro-roturas musculares que se han extendido demasiado. Cuando haces ejercicio, el músculo se ‘rompe’ para que le sustituyan fibras más gruesas y fuertes. Si el ejercicio ha sido demasiado intenso, aparecerán los temidos dolores. Para evitarlos (sobre todo si estás empezando) empieza con poca intensidad hasta que tengas el fondo físico adecuado y sube gradualmente la intensidad. Y descansa al menos un día entre grupos musculares.

 

  • Si dejo de entrenar mis músculos se transformarán en grasa» (FALSO): Y lo contrario también. El espacio que ocupa el músculo no es el mismo que ocupa la grasa y viceversa. Una cosa es cierta: hay una relación directa entre la masa muscular y el porcentaje de grasa corporal. Los deportistas habituales queman más calorías en reposo, pero si dejan de hacer ejercicio el metabolismo basal se ralentiza y es más fácil coger peso. Eso sí, el músculo tiene memoria, pero con el paso del tiempo tiende a volver a su estado natural.

 

  • Correr a menudo daña las articulaciones. ¡Es justo lo contrario! Correr ayuda a prevenir el desgaste de las articulaciones. El movimiento favorece la fluidificación del líquido de las articulaciones y aumenta el flujo de nutrientes hacia los cartílagos.

 

  • Demasiado músculo atrofia el cuerpo. Sólo es cierto en contadas ocasiones, caso de los culturistas, que sólo se centran en aumentar el volumen creando masas musculares muy por encima de las necesidades reales. Pero, en general, un entrenamiento de fuerza equilibrado ayuda a mejorar la movilidad. «Es muy importante que no descuides ningún grupo muscular y que aproveches todo el radio de movimiento en cada ejercicio«.

 

  • Entrenar solo un día a la semana no es efectivo. Verdadero. Aunque siempre es mejor poco que nada, entrenar solo un día por semana no es efectivo. “Es un error clásico entrenar solo los fines de semana. Los efectos se pierden con tantos días de parada de por medio. Lo mejor es poder hacer alguna sesión más larga el fin de semana y sesiones cortas entre semana si no se tiene más tiempo. Se ha demostrado que los entrenamientos bien estructurados y planificados de 20-30 minutos generan mejoras en la forma física. No sólo es más efectivo sino que se está convirtiendo en una tendencia, como por ejemplo el HIIT (High Intensity Interval Training) intercalar periodos de entrenamiento cardiovascular en alta intensidad a un 80-90% de nuestra frecuencia cardíaca máxima seguido de periodos cortos de ejercicio cardiovascular a una frecuencia moderada.